La madrugada

La madrugada,
refugio
donde me cobijo
cuando me desvelo.
Proyecto una carta.
En ella te describo
el tiempo que hace fuera,
cómo hay
una lluvia fina y continua
en el interior de alguien
querido,
cómo la única vía que queda
es la de seguir el sendero,
no rendirse
y permanecer fuerte.
También te hablo
del nuevo trabajo que
pronto comienzo,
de la soledad de mis noches
que guardo
como un tesoro,
de la carta que acabo
de convertir en verso,
de las tardes en que quisiera
sentarme a tu lado,
de la palabra
que fácil brota del
manantial
del entusiasmo,
de la tranquila
lentitud del tren
hacia la mañana.
El poema alcanza la penúltima estación.
Próximo destino:
La renovada luz
que anuncia el alba.
Comenzará un nuevo día.
Estarás en casi todos los versos,
en las fuentes calladas,
en las calles,
en los parques,
en las plazas,
en los poemas que no he escrito,
en las ganas.

Pasar la página

Pasar la página,
terminar el poema,
para escribir
otros nuevos.
Rescatar de lo vivido
lo positivo,
esa cosa de saberme tan bien
junto a ti, ese rastro que en mí queda
de tu sonrisa, de
la luz que de tus ojos fluye.
En cada letra, en cada silaba,
en cada palabra, en cada verso,
habrá algo que te pertenezca,
algo tuyo y de nadie más.

la rosa que corté del jardin

La rosa que corté del jardín
esta mañana,
quizá no te la pueda dar hoy
pero habrá otras rosas
de otros jardines
que, tal vez, pueda darte.
Mientras tanto,a
a esta rosa le compuse un
retrato,
que te envío
con el deseo de un maravilloso y luminoso día.

Haciendo lo posible

Haciendo lo posible,
escribo el siguiente verso,
el verso posterior,
completo la pequeña
estrofa y abro una
nueva ventana
a la incipiente noche.

nos queda mucho por ...

Sin prisa.
Nos queda mucho por vivir,
mucho por amar,
mucho por aprender,
mucho por estudiar,
mucho por pasear y descansar,
mucho por cocinar,
mucho por viajar,
mucho por sonreir.

si mañana fuera el último día

Si mañana fuera el último
día de la existencia,
y no supiera donde habitas,
recorrería las calles
parándome en los portales
para preguntar si estás.
Saltaría las rejas de la convención,
el protocolo de seguridad
de la guardia que custodia
al rey o a la reina de un castillo,
con tal de ver tu rostro
por última vez.
Bien sabes,
que aunque no me lo pidieras,
enfrentaría con palabras
los argumentos
que construyen
la recta sociedad de moral
y de costumbres
y su tenebroso y oscuro
ejército de soldados, jueces
improvisados, escribanos,
mensajeros y escuderos.
Si mañana fuera el último
día de la existencia,
elevaría tu nombre al viento
y te ondearía como
bandera-libertad

Sin rodeos

Esta noche
me propuse escribirte
sin rodeos.
Espero no te importe.
El panorama
no acompaña a la palabra
que el verso hilvana,
al verso que la estrofa
atesora.
Pero te sigo componiendo
estrofas. De ésto no hay duda.
Para mí, ahora y antes
forman parte del mismo
conjunto.
Permiteme que ahora te hable como antes,
que surja en este instante
el afecto que huye de la obsesión.
Me doy cuenta...
Cuando camino hacia ti,
hay veces que
descuido otras parcelas
de mi vida y que
cuando creo llegar,
todo parece un espejismo.
Sin rodeos, te diré
que seguiré andando
(trabajar las parcelas)
(resistir el vendaval del tiempo)
(no importa cuánto tarde).
No hay cosa en
este mundo más valiosa
que la de saberte
feliz.

Las melodías de la noche

Un dulce compás al abrir la ventana
Cadencia y ritmo
De la brisa primaveral
Una luna llena
Realiza la pieza de un solista
Las estrellas forman
La orquesta de la madrugada
Suena cerca el casi mágico
Sonido de las flautas
De pronto
El piano construye
El suspiro
El arpa habla de la fuente
Sigilosa
Esta música
Habla de lo mucho
Que te admiro
Esta melodía
Recita tu nombre
Esta sonata
Nos habla de la alegría nueva
Que se forja
En las fábricas ocultas de la noche

La causa y la consecuencia

La causa y la consecuencia
Nunca la fuerza venció a la astucia
Pero esa no es la causa
De este poema
Pues no habla de vencer
En esta parte del camino
Para mi es más importante
Hablar con el corazón
El motivo de escribirte
Es sencillo
Esta tarde
Como de costumbre
Me dio por extrañarte
Si me acerco, te alejas
Debería intentar la técnica
Inversa
Pero vengo cargado
De buenas razones
A sabiendas de las consecuencias
La causa : Las ganas de verte
Las consecuencias : Te espero
Mientras sigo aprendiendo
Las lecciones cotidianas
Sin creerme más
Ni menos que nadie
Mientras te guardo
Una habitación en mi alma
A la que puedes venir
Pero avisa antes,
por favor

Elegiría

Elegiría
El acto antes que la palabra
La linea curva antes que la recta
La humildad antes que la arrogancia
La ternura antes que el desprecio
La soledad antes que la escasa compañía
La luz de tus ojos, sobre todas las cosas
El verso escrito en papel antes que en ordenador
La verdad antes que la falsedad
¿ Por qué es tan complicado
entender que el verdadero amor
se muestra y no tiene plazos ?
Las ciudades invisibles antes que las
visibles
La paciencia como virtud que admiro
Una canción alegre tarareada o silbada
Verte llegar de lejos en una calle
llena de gente
Tu sonrisa en el espejo
La sonrisa de los niños
El mapa impreciso de un retrato
Caminar lento
Abrir los brazos
Y recibir el nuevo día
Con el gesto renovado

Crónica de la medianoche

La medianoche ha llegado.
Momentos últimos del sentir consciente.
Cerraré los ojos, entraré en el sueño,
espero verte en la cinta cinematográfica
que ha de proyectar mi cerebro.
Aunque solo sean fragmentos,
un trocito de escena,
una frase dicha
y repetida para el recuerdo.
La medianoche ha llegado. Casi se hace el silencio. La casa, el edificio, la calle.
Amanecerá un nuevo día.
Un día diferente.

La fé

La fé que me mueve hacia adelante
y que me impulsa
a caminar hacia ti
No la trae ningún Dios
No tiene explicación
Extraterrena
Pese a ello
Es intención pura
Acto cotidiano y nítido
Yo te consagro en los altares
plagados de las flores
que trae la primavera
La fé que me mueve hacia
adelante y que me lleva
es observada a diario
por los rincones
de esta ciudad
en los que la vida fluye lentamente y
son testigos de que llueven las nubes,
de que el sol es el iluminado y de que las frutas sostienen al árbol frutal.

Por la ribera del Genil

Por la ribera del Genil se huele el jazmín, el azahar y el tilo. En la tibia mañana, susurra el río y uno busca la calma haciendo un alto en el camino. Carretera de la sierra, arrabales, casas bajas, juncos y edificios de ladrillo, balcones con toldos verdes y chapas. Las primeras montañas se aprecian y la cercana via que va cargada de tráfico propone la banda sonora. En un sendero lleno de plantas, hay una fuente pequeña y también susurra el agua.
Ribera del Genil, un viaje hacia la calma.

Disyuntivas

De todas las disyuntivas
que se me ocurren,
nunca te plantearía elegir
entre el mundo y yo.
Porque sé que hay un bello arbolito
que te necesita para crecer,
para madurar y hacerse fuerte.
Y no es que no te extrañe,
ni te eche en falta,
ni haga caso omiso
a la letra pequeña de los acuerdos
y de los contratos,
es que comprendí
que puedo estar distantemente a tu lado

Sí se puede

Sí se puede
vivir intensamente
reír con ganas
amar como si no hubiera
un mañana
mirar de frente
confiar en el prójimo
trabajar incansablemente
cocinar escuchando la radio
agarrar la cuerda
que nos une al presente
abrazar sin aplastar
atender sin agobiar
proponer y enviar
flores, versos,
elementos de afecto

Entre tú y yo

Entre tú y yo cambiaría,
la distancia que nos separa,
la cordura que aprieta,
la sensatez
que gobierna, sugeriría abolir
todos los tratados
de buenas costumbres
patrocinados por el ABC,
sin olvidar la compasión por
los demás.
Entre tú y yo
propondría una fiesta
en la que la protagonista
fuera la tarde,
como anfitriona, la primavera,
y Madrid nos recibe sin
prevención, nos concede la
amnistía para caminar por las aceras.
En ese instante, no hay culpa,
ni tristeza,
el poeta y su musa,
y muchas calles con escaleras.
¡La ciudad es tan hermosa!
Pero no lo es tanto como tú.
Si no puedes venir mañana, avisa.
Los jardines y yo escribiremos
pequeños versos
al mapa luminoso de tu sonrisa.

Ojalá

Ojalá contigo, lo pasajero se volviera eterno

Eso sucedió ayer

Eso sucedió ayer
pero ahora
miramos al
momento
presente, a los futuros
momentos, con lo aprendido,
con la alegría y las ganas
intactas

Dioses, héroes y atletas

Puede que solo sean clichés.
Los dioses rechazan su condición
de mortales.
Ellos crearon lo visible
Lo invisible también
pero a ello contribuyen
los hombres y mujeres
de carne y hueso.
Hay héroes que son narcisistas.
El acto heroico es una
consecuencia de su desmedido
ego, de su ambición sin límites.
Hay héroes cotidianos al estilo
de Celaya. A éstos los prefiero.
Saben que la vida se acaba
y que han de resistirla
como el yunque es golpeado
con el martillo terco.
Los atletas, en cambio, son
esforzados y silenciosos luchadores.
Alcanzar las metas, elevarse más alto,
ganar un punto, sumergirse en el agua,
rodar más deprisa.
Los atletas son soldados enviados a
misiones fugaces,
a una guerra contra si mismos,
contra los elementos y el tiempo.
Son ejemplares,
y demuestran a diario,
que lo imposible, salvo claras
excepciones, forma solo parte
de los diccionarios

La tarde en la ciudad

La tarde en la ciudad.
Por la ventana abierta, a
los pájaros se les escucha cantar.
Sonido de coches.
El sol asoma entre las nubes.
Me pregunto dónde estarás
o qué harás o cuál será
tu estado de ánimo.
Recibamos el ahora con
la mejor sonrisa.

El Oráculo

El Oráculo ha hablado.

La maldición de los dioses nos apremia,
pero hay dioses cotidianos
que le dedican sus plegarias,
al amor,
a la alegría,
y a la construcción de la belleza.

También hay otros que
resumen
la línea imaginaria que nos acerca a la pureza,
cuestión
propia
de los viajes interiores,
de los caminos que se recorren
en desiertos de arena y piedra.

El Oráculo ha hablado.

Hoy es el día.
Ésta, la senda.

Los números cuentan

Los números cuentan,
marcan la historia,
cimentan el cálculo.
Sirven para tomar decisiones,
limitan la vida
y proponen resultados.
Los números también
hablan
de las veces que te recuerdo,
de las veces que sin saberlo
tu nombre aparece
como por arte de magia.
Hay matriculas de coche
que descifro,
pasatiempo cotidiano
y creo que tienen un significado
oculto
como código que intuye
el futuro posible.
Los números me hablan
de ciertas fechas, pero
no es el pasado
el lugar donde quiero pasar mi tiempo.
Quisiera escribir con números
la curva que traza
el beso de hoy,
el que te enviaría
cada mañana

Velocidad relativa

Ir deprisa no significa llegar antes
Llegar antes no significa
mantener el puesto
Mantener el puesto
no debe ser motivo
de preocupación
La preocupación se instala
despacio,
se desaloja lentamente
Mas lentamente avanzamos
y, si sonreímos y actuamos sin miedo,
el vertiginoso futuro inmediato
podrá ser nuestro

Contigo

Contigo,
no es solo un viaje.
Ésa es una de las dificultades
de mi complicada acrobacia.
Pero supongo que por algo se empieza.
No vine a poseerlo todo.
Tal vez pueda proponer una vuelta
a la ciudad.
Madrid nos esconde
con su complicidad y su ternura.

No estés triste

No soy quien para decirte
cómo has de sentir
pero no estés triste
porque cada mañana
hay una luz nueva,
porque si me lo permites,
te traeré
nuevas canciones y
nuevos poemas,
palabras de combate
y resistencia.
Soltar las anclas y abandonar el puerto
del dolor, afrontar el trayecto
por el mar de las pequeñas cosas,
que, a diario,
nos hacen sentir bien, nos abrigan
y confortan.
No estés triste porque ningún
mal duró cien años,
ningún imperio fue eterno,
ningún sufrimiento dejó de ser tortura.
Ningún tren estuvo mucho
tiempo en una estación
parado para emprender el rumbo
al destino
de la esperanza,
calma y felicidad plenas.

Donde el corazón me lleva

Donde el corazón me lleva,
ya no hay duda.
Si un camino termina ,
invento otro
y continúo
andando
sin importar
cuánto tardaré
en alcanzar
el destino

un dia nublado

Aceptar el dolor y afrontarlo,
no hacer como si no doliera,
liberarse del pensamiento
negativo y sustituirlo
por emociones nuevas.
En mi corazón,
lluvias y tormentas.
En mi vida,
un caos organizado.
Esa parte de amor que te tengo
que está ajena al dolor,
no cambia. Podría caminar por ti largos desiertos, escalar elevadas montañas, regar los rosales, cuidar del clavel.
He de armarme de paciencia.
Vendrán años duros y en los que habrá pequeñas alegrías, tal vezdistancia entre los dos,
ganas de verte, ilusión y trabajo.

Cuando estás

Cuando estás,
todo cobra sentido, la
habitación se ilumina,
tu sola presencia
irradia esplendor.
Cuando no estás,
ni puedo oírte ni siquiera
hablarte a través del teléfono,
los muros
de contención
de la rutina llevan un manual
de instrucciones
para no ser rebasados
  . Entonces me alejo,
pienso en ti y
trepo hasta alcanzar
el otro lado.
Escribo trozos de la noche
y los envuelvo
en papel
poniendo tu dirección completa y
te dedico sus colores
más brillantes.

Las horas solitarias

Camino por las horas solitarias,
preguntándome si
mi soledad y la tuya
pudieran
unirse
como aliadas
para resistir
juntas
la llegada
del primer albor del día.

cuando la noche

Cuando la noche
traza y dibuja sus caminos,
conjugo el verbo estar
y creo frases
como
"si estuvieras...",
"estaría..."
pero no son tan necesarias
porque, de alguna manera,
estás.
En el recuerdo,
en el deseo,
en la ilusión,
en cada fragmento de afecto
cuya intención
te pertenece.
No hay distancia insalvable
y la noche
me habla
de tí.
También pienso en cómo
te sientes.
Mis versos no buscan
proponer el dictado de mis
anhelos.
Cada verso intenta
abrir ventanas de esperanza

A veces

A veces
me despisto y una palabra
baila sobre una hoja de papel.
Si estudio, miro las paredes.
Si cocino o trabajo, tarareo
canciones.
Recuerdo tu nombre
y los caminos
que me llevan hasta él.
Esta noche,
me gustaría pasear por
la ciudad
y encontrarte por
casualidad.
Nada más verte,
me alegraría
y el poema volvería
a comenzar.

equilibrios inestables

A veces la realidad propone
equilibrios inestables
y, frente a esto,
¿que hacer?
Una buena opción
es la que propone el corazón,
y solo hace falta
seguir su tic-tac,
la sístole y la diástole
conjugadas con el verbo latir.
Viene la nube negra de
la confusión que cubre el mar de las dudas.
Contra esto, intento resistir,
hacer que el sistema
sea estable,
despejar la confusión,
recibir de buen grado al sol
de las certezas,
cargarme con buenas razones y
escribirte poemas.

En un bolsillo

En un bolsillo trasero de mi pantalón,
he encontrado un pequeño
trozo de papel celofán.
Lo quito despacio y
lo pongo en
la papelera.
En el otro bolsillo, traigo
un fragmento de poema
escrito en un pedazo de servilleta.
Habla de la estación de las flores,
del mes de Abril, de la ciudad,
de ti, de mi y de todos.
En mis bolsillos
guardo crónicas del día.
El tapón de una botella de agua,
unos cromos, y muchas palabras
para construir versos bellos
entre tu umbral y el mío con los
que poder regalarte
islas de la noche, piezas del día,
lunas esmeralda.

Atrevámonos a soñar

Los emperadores están
vestidos.
Dame la mano
si quieres.
Atrevámonos a soñar,
a desgranar la tarde,
a mirar al instante con
ojos amables.

En confianza

En confianza, te digo
que cada vez que te escribo
o me dirijo a ti, habla
el corazón.
En confianza,
no le cuento mi vida a
cualquiera.
Cuando se trata de ti,
todo es un caso especial,
todo es un mundo aparte.
Un mundo formado por la complicidad
a la que aluden las palabras, por
la tranquilidad de saber que uno
cuenta con alguien,
aunque no lo vea.
En confianza,
las cosas que digas,
en mí, están a salvo.

Brilla hoy el sol

Brilla hoy el sol
Te echo de menos
Valoro cuanto tengo
El pasado es un laboratorio
fotográfico
Podemos evocarlo pensando
en lo que nos separa
pero prefiero evocarlo
pensando en lo que nos une.
Hay toda una serie de instantáneas,
lugares
y detalles que de ti guardo.
Desearía que estuvieras presente
Tengo tantas cosas que contarte

Este poema es ofrenda

Este poema es ofrenda,
invocación,
huye de la palabra persecución,
visita la sana
costumbre
de resumir
sentimientos.
Hoy fue un día tranquilo.
La tarde era calma,
una suave brisa acariciaba
el rostro.
Uno casi se habitúa a tu ausencia pero son la
nostalgia de tu voz,
el aroma de tu pelo,
algunos
paraísos cotidianos por los
que quisiera
transitar.
Este poema es ofrenda,
que no caduca
ni compromete,
que no acaba
ni se disuelve,
que continúa
y no se extingue

Si mi ego

Si mi ego
te persigue
te abruma
te incomoda
te cohíbe
te condena a calabozos
vitales
te calumnia
te difama
entonces le propondré
que
te deje vivir tranquila
que ayude a construir
versos
que se parezcan a tu
gentileza
y hermosura

Si esta noche de Abril

Si esta noche de Abril,
le concedes un lugar a mi sonrisa,
a las palabras que siguen guardadas
en el cajón del afecto,
te diré que cuando entra la madrugada,
surgen de la nada
vocablos nuevos
como luna, compasión y ternura.
Luna, que estando presente,
se esconde entre las nubes
pero que brilla
majestuosa.
Compasión como ejercicio
para aquéllos que por amor sufren.
Ternura, causa o efecto del cariño.
Si esta noche de Abril,
ves que no escribo,
no es porque no te piense,
ni desee describir
mis anhelos.
Será porque los poemas
sustituyen a las cartas,
los versos y las estrofas
a los párrafos y
a la prosa.
Si esta noche de Abril,
te envío mil rosas,
quizás no sean tantas
o quizás no sean bastantes.

buenos días

Buenos días te deseo
en la primera luz de la mañana.
Que los instantes
que se sucedan
sean como dulces frutas
que caen lentamente
del frutal
y los lugares
sean como islas silenciosas
en las que se escucha de fondo
el susurro del mar y
donde habita la calma.
Buenos días te deseo
y que, en esta jornada,
se cumplan
algunas metas
incumplidas o atrasadas.
Y si no fuera posible,
pues habrá que continuar caminando,
sin prisa,
hacia el lugar
donde la realidad las hace ocurrir.

Mis palabras

Mis palabras no son mandato, 
ni orden, ni instrucción

Mis palabras son barquitas que
navegan lentamente por 
el río que une nuestras ciudades

Quieren ser amables contigo, 
huir del ruido 
y oponerse gentilmente
al verbo conformarse

No importan las barreras

Cuando la vida y las gentes colocan barreras,
obstáculos, límites que aprietan
y asfixian, lineas rojas,
uno debe liberarse y actuar
con mente clara,
apelando al corazón. Mas cuando, a priori ,no habia obstáculos,
ni límites, ni lineas rojas,
ni venían los gendarmes
en escuadrón.
Hay gentes hábiles en plantear
problemas, construir
trampas, en hacerle creer al otro
que todo lo que intenta
es un error.
Pero mayor error es
el de no amar.
Amar es algo más de lo que
creemos
De estos pozos de la vida,
uno sale perdonando,
apreciando la bella luz de la mañana,
recordando tu hermosa
sonrisa y construyendo
un puente a la poesía donde
crecemos libres.

Una historia que contar

Todos tenemos una historia que contar
Motivos y razones
la cubren .
Miradas y perspectivas
la enfocan.
Lugares y fechas
la envuelven.
También en ella hay:
Un pasado del que partir .
Un presente que construir.
Un futuro al que llegar.
Todos conocemos
una historia
que nos fascina
y a la que no deseamos
renunciar.
Vivida, vivida a medias, soñada,
imaginada, celebrada.
A veces no hay nada que
narrar, pero, de pronto,
surge una palabra que resbala
y desliza
y de la nada, en la
que nos hallamos
y de la que nos alimentamos,
sale una frase y podemos
continuar.
Lo que nos seduce y nos conmueve
siempre está.
No hace falta traerlo.
Es telón de fondo, banda sonora de nuestra obra
en la que no hacen falta máscaras.

Confundir los términos

¡Que sencillo es confundir los términos
cuando pienso en ti!
¡Que sencillo es quedarse distraído,
observando el vuelo de las
primaverales aves o la zigzagueante trayectoria de una mariposa
que se posa en la rama
de una encina
al oír tu nombre!
En ese momento, la mente se queda
en blanco y uno confunde los términos
de la ecuación
y antes se hace después,
tarde se transforma en pronto,
corto se dice largo,
lejos se convierte cerca,
y así sigo y nunca acabo
Lo pequeño es grande,
lo profano se vuelve sagrado.
¡Que fácil es confundirse
y qué poco importa
estar equivocado!

Lento y sutil discurrir

Lento y sutil
discurrir del amor,
luz conocida que
traspasa el umbral.
Ojos que esperan
ver
tu sola presencia al
cruzar
la invisible frontera
entre allí y aquí.
Esperar y avanzar.
No caer en el desánimo,
y si eso ocurriera,
levantarse y caminar.
Hacer del sendero una fiesta,
de la que todos podamos
participar.
Cada paso es un poema,
cada poema es una flor
cuyos pétalos
delicado aroma destilan.
Ojos que esperan
y comprenden que hay
que dejar la vida continuar
y que es complicado
calcular.

Vivir hoy

¿Para qué vivir deprisa?
¿Para qué ir corriendo
a todos lados?
Si la vida apenas espera.
Vivir hoy es lo acordado

Los niños, las niñas y la poesia

Los niños, las niñas son los grandes poetas, las grandes poetisas
De su lucidez, de su luminosa manera
de enfocar la realidad que les rodea,
de abarcar su pequeño y gran mundo
De su capacidad para describir con
dulces palabras una emoción,
un estado de ánimo
y elaborar el mapa sonoro de sus
sentimientos
De su fuente temprana,
brota el presente inmediato,
el pasado certero,
el futuro posible
de una imagen, una crónica o un anhelo.

Cuando viene la noche

Cuando viene la noche,
y en mi mente se acumulan
palabras sobre ti,
me pongo a moldear los versos
y articular las estrofas,
llenar la hoja en blanco
convocando a la estación de los lirios,
de las rosas y de todas las flores.
También es el periodo
del deshielo,
de los ríos que se hacen caudalosos,
de los árboles frutales.
No tengo prisa por llegar hasta ti
pero reconozco que, consciente
o inconscientemente,
casi cada poema tiene
algo tuyo,
adjetivo o tributo.
Cuando viene la noche
y tu recuerdo me convoca
a cambiar el ayer por el hoy,
concluyo, entre otros
pareceres, que
debo seguir aprendiendo
de la distancia
sin que
decaiga el
elogio a lo que significas.